Quiero compartir el reportaje de esta semana en “El ECO de Sitges” sobre la inmensa Josephine Baker, la “Venus de ébano”.
Josephine Baker es uno de los personajes más atractivos del siglo XX. Norteamericana de raza negra que triunfó en el “music hall” en Paris con un vestido hecho de plátanos y que cubría bien poco de su atractiva anatomía. Resistente contra el nazismo y espía a favor de la Francia libre. Defensora de los derechos civiles intervino en el gran mitin del “I have a dream” de Martin Lutker King. Vida apasionada con amores de todos los colores, empleó su fortuna personal y los beneficios de 45 años de estrellato mundial para constituir una familia multiétnica adoptando 12 niños-niñas de diferentes razas, culturas, lenguas y religiones. La llamó “la tribu del Arco Iris” y fundó un hogar en un castillo francés del que finalmente fue deshauciada. Quería demostrar que todas las personas somos iguales.
En el verano de 1969 visitó Sitges, atraida por la oferta de un empresario inmobiliario que le ofreció terrenos gratuitos en la urbanización “las Colinas” para construir su hogar multiracial. Pero resultaría que era el anzuelo de una operación inmobiliaria por la que el pícaro empresario quería aprovecharse de la publicidad generada y así poder vender parcelas. Se fue desencantada y un derrame cerebral acabó con una vida generosa, dedicada a la lucha contra el racismo, la segregación y a favor de los derechos civiles.
Francia, ahora, le rendirá los máximos honores y sus restos reposarán en el Panteón, el Cementerio de las glorias francesas. Os dejo la edición en catalán.