Torino (Piamonte, Italia), entre sus grandes virtudes, es la ciudad de la FIAT, de la Juventus, del Ferrari y Alfa Romeo, del crucigramero río Pó y fue la última capital de la Italia monárquica. Aquí nació el vermut Martini & Rossi. En su catedral se venera la “Sábana Santa”, reliquia por la que peregrinan católicos de todo el mundo… Y es la ciudad del café. Y, también, de los cafés vintage, que son espacios públicos llenos de poesía y nostalgia, Los italianos son auténticos “gourmets” y expertos artistas en la elaboración de todas las variedades posibles de cómo hacer y servir un café (Aclaración: solo hay un tipo de café, el expreso, que se elabora con una cafetera de presión made in Italy).
El culoinquieto tomó notas sobre el mundo de la cafeína en una visita a la fría, gris, olímpica y destemplada ciudad del norte de Italia. Hay un hombre clave: se llama Angelo Moriondo y su genial invento. En 1884, después de meses de trabajo, sigiloso para no ser plagiado, este inventor y empresario turinés presentaba y patentaba un ingenio revolucionario en la Expo General de Turín. Nacía la primera máquina para hacer el café expreso y así, de forma tan sencilla, empezaría a cambiar la vida para millones de adictos. Esta máquina consistía en una caldera enorme desde la que se hacía pasar agua caliente sobre una cama de granos de café y otra caldera que producía vapor sobre la cama de café y así se completaba la infusión. George Clooney y sus cómodas capsulitas suizas vivían en el limbo.
En esta escuela del café, el culoionquieto aprendió a que nadie debe dudar de este principio básico, ya sea grano colombiano, brasileño o arábigo, algo que no admite debate: solo hay un café verdadero que es el expreso, al igual que no hay más que una Iglesia que es la católica, apostólica y romana de nuestros infantiles catecismos. Estas son las principales modalidades italianas de un amplio catálogo de cómo elaborar un café:
Caffè ristretto/lungo/doppio, con la misma dosis de café molido y más o menos agua;
Caffè machiato, manchado con unas gotas de leche como nuestro cortado;
Cappuccino, un cortado con leche caliente vaporizada para obtener espuma que no es nata;
Caffelatte, nuestro café con leche al estilo Ana Botella in Plaza Mayor;
Marocchino, un expreso espolvoreado con cacao en polvo;
Mocaccino, un expreso con chocolate caliente;
Caffè viennese, un mocaccino con nata montada;
Caffè shakerato, un batido de hielo con café;
Caffè caretto es nuestro carajillo (con grappa o brandy) que también se conoce como sambuca, fernet, mistrà….
El culoinquieto se pateó los mejores establecimientos turineses donde ofrecen cafés humeantes y olorosos . Pero lo dejamos para otra entrega. PEDRO PALACIOS (serculoinquieto.com)